Los centuriones Macro y Cato están a las ordenes de un recién llegado Maximio, y tiene la orden de Vespasiano, legado de la segunda legión de defender a uno de los vados.
En lo que parece ser el ataque definitivo contra las hordas de Carataco, la tercera cohorte debe desempeñar un papel de primer orden, cortando una posible retirada.