Este libro abunda en esa tradición del viaje como una quintaesencia de la aventura literaria. Viajar contiene además la esperanza de saltar fuera del mundo y permite a la vez un ajuste de cuentas con la propia historia personal. Desde esas coordenadas, Partir despliega su singular road story como despedida, travesía, ruptura en busca de un sentido y un destino.