Su fuerza da miedo: gigantes grandes como montañas, dragones que escupen fuego, ogros y ogresas devoradores de niños, titanes y trolls, han llenado nuestros sueños infantiles y alimentado nuestros espantos.
Estos seres primarios y temibles, surgidos del caos primordial, son poseedores de tesoros fabulosos que protegen con ferocidad.