De pequeña estatura, habitan en cuevas o en el fondo de subterráneos tenebrosos y conocen todos los secretos de los metales raros y de las piedras preciosas.
Es el pequeño pueblo de enanos, gnomos, lutins y gobelins, que Édouard Brasey ha ido a sorprender en los relatos fabulosos que circulan sobre ellos desde hace miles de años. ¿De dónde vienen? De Laponia, dicen.