Las esposas de generales y altos mandos del Partido Nazi se reúnen todas las tardes en el Hotel Adlon de Berlín, charlan y beben champán despreocupadas mientras Europa se prepara para la terrible guerra que está por estallar.
Son las damas del Reich y se sienten intocables. Por eso, cuando sus cuerpos comienzan a aparecer brutalmente destazados a orillas del río Spree, todas las alarmas se disparan.