Las ventas suceden en la mente del vendedor mucho antes de que se produzca la visita al potencial cliente. De lo que ahí ocurra dependerá el éxito o el fracaso de la empresa, cuya actividad global está encauzada a ese instante concreto. Por eso la venta no es un mero trámite más; es la razón de ser del proyecto, y manejar con acierto sus claves, las reglas que la rigen, supone todo un arte.