Tengo seis años. Estoy con mi papá, vamos rumbo a casa y miro el escaparate de la juguetería que está cerca de la parada del autobús. Me encanta ese auto rojo a control remoto. Mi papá siempre se apura para que deje de mirar los juguetes. Pero es que me encantan. De repente volteo la cara y busco a mi papá. No lo veo. Miro en todas direcciones. Mi papá se ha perdido.¿Donde estará?, ¿Como estará?, ¿Estará asustado? ¡Pobre papá!.