¡Qué fue lo que sucedió para que de repente Pablo se pusiera a pintar?
Su papá, que era pintor, dejaba lapices de colores y pinceles a su alcance pero Pablo siempre los ignoraba.
Una tarde, después de ir por primera vez a una corrida de toros, Pablo tuvo un sueño extraño y es entonces que empezó su viaje al revés.