Darío y nicolás salen al parque a pasear, Nicolás aún no conoce las números, pero con ayuda de Darío los irá descubriendo. En cada cosa que ven, los números se van revelando como un misterio. Con amor, humor y verso, Nicolás comprobará maravillado que el cisne lleva al dos en sí y que el ocho puede ser un gordo sin pies ni manos.