¡Albert! ¿Te comiste la tarta? No. No puedo haber sido yo. Estaba en la cocina. ¡Aja! Y ahí estaba la tarta. Sí. Yo estaba en la cocina cuando los pingüinos me atraparon? La historia más increíble sobre una tarta desaparecida, una manada de pingüinos hambrientos y un niño todo embadurnado de dulce que asegura estar diciendo la verdad. Él no se comió la tarta. ¿Será realmente cierta su historia?