¿Por qué es tan excitante leer el "Príncipe", de Maquiavelo? Tal vez por que remueve el sedimento de ciertas pasiones que creíamos superadas, al menos fuertemente encadenadas por la cultura y la ética. Ya que al ir leyendo, se nos revela una emocionante tendencia que no acabamos de admitir como propia, pero que se nos impone con gran frescura y naturalidad pues en cada uno de nosotros se esconde un príncipe voluntarioso un astuto zorro de la política, un ser dominante y poderoso que espera el momento para dar el mordisco y arrancarle la vida a un gran trozo de poder.