En la historia de la filosofía se considera a la obra de Spinoza, de la que forma parte la Ética demostrada según el orden geométrico, como la mayor construcción sistemática en la época de los sistemas. Roland Caillois afirma, por su parte, que hay que leer la Ética como uno de esos raros textos que han sido pensados de un extremo a otro por el genio de uno de los rarísimos filósofos cuyo espíritu sistemático ha sacrificado todo a la verdad; sabiduría que no ha cesado de seducir a los más grandes pensadores y que Spinoza definía como "una meditación de la vida".