Trabajando en una versión alternativa del Londres victoriano, la Bibliotecaria-espía Irene se ha adaptado a una rutina recopilando importantes obras de ficción para la misteriosa Biblioteca, e integrándose a la perfección en la cultura local.
Sin embargo, cuando su aprendiz Kai —un dragón de sangre real— es secuestrado por los feéricos, su operación encubierta, cuidadosamente diseñada, empieza a desmoronarse.