En un lugar conocido como La Cornisa, una civilización está atrapada entre un gran abismo y una montaña escarpada. No hay forma de que nadie escape del páramo helado sin caer en una trampa mortal.
Sus habitantes no saben nada del mundo exterior excepto que es donde residen los glacians, criaturas místicas aladas que sobreviven a cambio de un sacrificio humano al año.