Desde que llegó al gremio, Sonea ha aprendido mucho. Pero hay cosas que preferiría no haber conocido jamás, por ejemplo, todo lo que esconde el gran Lord Akkarin, y la advertencia de éste sobre la venganza que preparan los antiguos enemigos de Kyralia. Por su parte, Cery ha tenido suerte en los últimos años. Disfruta de una buena posición entre los ladrones y dispone de contactos importantes en los bajos fondos y las altas esferas.