Esopo fue un fabulista griego originario de Asia menor. La historia cuenta que era un esclavo jorobado, tartamundo y de extrema fealdad, el cual se supone vivió entre el 620 y el 560 antes de Cristo.
Sus relatos se caracterizan por ser narraciones cortas y tener siempre una conclusión moralizante o "moraleja". En ellas, Esopo "humaniza" las conversaciones de los animales y plasma todos los vicios y virtudes de los hombres, con un gran talento satírico.