Para ser llenos de la plenitud de Cristo debemos conocer a Cristo en Su plenitud. El que era, es y ha de venir. Juntos haremos una inmersión en la persona de Jesucristo y seremos transformados por Su belleza.
Nos enfocaremos más en Su: PRIMER AMOR, HUMANIDAD, MUERTE, RESURRECCIÓN, ASCENSIÓN, SACERDOCIO ETERNO y REGRESO.