El arte de la adivinación, especialmente de la adivinación del porvenir por medio de las cartas noes una superchería, como algunos suponen. Sucede que algunas personas que se dedican al arte de la cartomancia, más por especulación que por convicción, desvirtúan dicho arte; bien, por no poner cuidado al practicarlo; bien porque no han estudiado en libros ó tratados concienzudamente escritos; bien, por ignorancia o bien, finalmente, por otras causas que no queremos enumerar, y hacen de él lo que un mal médico con la medicina: en lugar de curar al enfermo lo envían al cementerio.