Tanto para la crítica como para los lectores, Franz Kafka supone uno de los más grandes escritores del pasado siglo. Dotado de una interioridad y unos poderes de expresión extraordinarios, ansiaba encontrarle un sentido a la vida y reflejarlo en sus escritos, a pesar de lo cual no pudo hallar más que paradojas. "El proceso" representa el mundo de un hombre dividido interiormente e inseguro de estar en la realidad.