Alfredo López Austin, uno de los mayores conocedores del tema, nos ofrece en este libro una clara síntesis sobre la cosmovisión de quienes habitaron antes de la Conquista en lo que llamamos Mesoamérica: un área cultural que se desarrolló sobre un territorio de límites variables en el tiempo, que en el norte llegó a rebasar el Trópico de Cáncer, mientras que en su parte suroriental ocupó la mitad de Centroamérica.