La crisis es una constante en la vida de las empresas, y en la labor diaria de los directivos. Ya sea por razones internas (reestructuraciones, fluctuación en el personal, errores graves en el manejo de cuentas) o externas (cambios en el mercado, nuevas políticas fiscales, acontecimientos de dimensiones globales como depreciaciones, guerras o pandemias) las organizaciones son siempre susceptibles de caer en situaciones que pongan en peligro su salud, y aprender a afrontarlas es clave para ser un líder exitoso.