Para Weber, la validez de una norma jurídica en sentido sociológico es un juicio empírico de probabilidad sobre unos hechos, la validez en sentido jurídico es un deber ser lógico, y ambas son cuestiones distintas. Por su parte, Kelsen hace depender la normatividad del derecho de su efectividad. El orden jurídico en su totalidad y cada una de las normas jurídicas en particular tienen que ser "efectivas en términos generales", es decir, tienen que "ser aplicada y obedecidas en general".