Todos los días, en el mundo, existen incendios y explosiones que causan innumerables desgracias para los seres vivos (personas, animales y vegetación); en el caso de las personas se pueden ocasionar daños materiales y hasta la pérdida de un patrimonio. El estudio de este tema es importante para las instituciones encargadas de la impartición de justicia, pues existen indicadores para saber si fueron accidentales o intencionales (ya que hay casos donde la delincuencia utiliza el fuego o algún artefacto explosivo para cometer delitos, como por ejemplo, podrían aplicar fuego para hacer un robo simple o, incluso, lo utilizarían para desaparecer cuerpos humanos).