El presente trabajo se realizó con base en una serie de entrevistas con algunas de las tantas víctimas de delitos que no han visto terminado su dolor y tampoco cómo olvidar el dolor interno que sigue perenne en ellas. Por ello las autoridades deben humanizase y estar más a favor de apoyar a todas esas víctimas, estableciendo programas de ayuda y apoyo permanente a las víctimas que siguen siendo victimizadas.