De acuerdo con el artículo 4o. de la Ley del Seguro Social (LSS), el gobierno federal debe garantizar a los trabajadores, y a sus beneficiarios legales, la atención médico-hospitalaria, farmacéutica, las prestaciones económicas por riesgos ocupacionales, por enfermedad y maternidad; así como los servicios sociales necesarios para el bienestar familiar.