Los hábitos alimentarios y el estilo de vida de los nuevos tiempos han contribuido a la creciente epidemia de las enfermedades crónicas. Así, algunas recomendaciones nutricionales que inicialmente servían para tratar patologías carenciales, hoy en día buscan la prevención de determinadas enfermedades crónicas cuya aparición pudiera estar vinculada a la dieta