Desde los experimentos pioneros de Gregor Mendel con guisantes en 1865, que sentaron las bases de la genética, hasta hoy, este campo de la biología ha recorrido un largo camino. El redescubrimiento de sus leyes en 1900 marcó el inicio de la genética moderna, con la introducción de la teoría cromosómica de la herencia. Se confirmó que el ADN era el portador de la información genética y más de medio siglo más tarde, en 1953, el descubrimiento de su estructura transformó la ciencia.