Por primera vez se revelan las perversiones sexuales de Muamar Gadafi que, lejos de pertenecer a su vida privada como aducen algunos libios que aun hoy temen decir todo lo que saben, formaron parte indisociable de su manera de gobernar y constituyeron la trama misma de su régimen político. En 2011, después de la revolución y de la muerte de Gadafi, la autora viajo a Libia para hacer una nota periodística sobre el impresionante acontecimiento que había derribado a una dictadura de mas de cuarenta años.