Suponga -nos dicen los autores- que cae en sus manos un frascos cuya etiqueta diga "zeolita". Verá en él un polvo blanco y fino. Su interés se ha despertado y recurre a un diccionario técnico pasa saber qué es la zeolita, y encuentra la siguiente definición: "las zeolitas, (si, las zeolitas, pues se trata de una familia de minerales) son aluminosilicatos hidratados altamente cristalinos que al deshidratarse desarrollan, en el cristal ideal, una estructura porosa con diámetros de poros mínimos, o sea de 3 a 10 angstroms.