Aventurero, inconformista y luchador, Paul Gauguin abandonó la civilización y la cultura de Occidente a la búsqueda de la belleza y la pureza de los pueblos primitivos.
Luchó incansablemente para encontrar la autenticidad en su vida y en su arte. Su estilo “primitivo “ rompió con el realismo, impresionismo y neo-impresionismo, y marcó el inicio del vanguardismo del siglo XX.