El cuadro cultural mesoamericano es como un poliedro de mil caras; y su apreciación no solo se alcanza hoy desde más variadas perspectivas, sino que estas han logrado más sólidos fundamen-tos.Román Piña Chan sostiene que poco se ha hecho para conciliar las fuentes históricas (de Sahagún) y lo exhumado por los arqueólogos en estratos de México y Centroamérica. De ahí que este libro se proponga el camino de la confrontación.