La historia del Homo sapiens suele contarse como una historia de tecnología o economía. Pero hay un motor más fundamental: la alimentación.
Cómo cazábamos y recolectábamos explica nuestra aparición como nueva especie y nuestra tecnología más primitiva; nuestros primeros sistemas alimentarios, del fuego a la agricultura, explican dónde nos asentamos y cómo se expandieron las civilizaciones.