En la actualidad, la planeación estratégica es un recurso indispensable para todas las organizaciones que tengan como prioridad incrementar la calidad en sus procesos. En lo que se refiere a los servicios de salud, en donde el trato con la gente es una constante, su implementación es ética y moralmente obligada, pues sólo así se alcanza la mejora continua en sus actividades.