"Cabalgando bombas para espiar al enemigo, lidiando con feroces leones y osos, aupándose a sí mismo, caballo incluido, para lograr emerger de las aguas, abatiendo toda una bandada de patos de un sólo tiro o colgándose de la mismísima Luna... el barón de Munchausen logró hacerse un merecido nombre entre los mayores héroes... de la historia de la humanidad. A las alocadas andanzas de guerra y caza de este rufián de noble cuna se fueron sumando las más divertidas leyendas del folclore popular europeo hasta convertir su personaje en la personificación del embuste patológico y en uno de los grandes depósitos de aventura irracional, absurda y desternillante del que se ha nutrido tradicionalmente la literatura fantástica y humorística. El lápiz de Gustave Doré aumenta el prestigio de esta edición.