Esta es la historia de Renata que se atreve decir lo que muchas mujeres callan por miedo a ser juzgadas. Es el testimonio de una mujer y de otras mujeres, que podría ser el tuyo: una mujer capaz de enfrentar con valentía sus propios demonios. Es la crónica de un desengaño donde la protagonista escarbó hasta a lo más recóndito de sus entrañas, rasguñando la herida hasta desangrarse para encontrarse con su verdad.
Con semblante moribundo, pero con muchos ovarios, se dio a la tarea de reconstruirse, se despojó de prejuicios y miedos. Es una mirada a sí misma en un trance doloroso.