Una extraordinaria obra narrativa que confirma a Arriaga como uno de los mejores escritores de la literatura contemporánea. Una mañana Ramón Castaños, un adolescente que vive en un pequeño poblado en Tamaulipas, descubre en un sembradío el cadáver desnudo y apuñalado de Adela, una muchacha a quien apenas conocía. Cuando el resto de los pobladores llega a la escena del crimen, corre el rumor de que quien ha muerto era la novia de Ramón.