Asúmelo, no tienes opción -le dijo Alex al Hombre Enmascarado-. ¡Hay solo una manera de bajar, y vendrás con nosotros! El Hombre Enmascarado introdujo una mano en el bolsillo de su chaqueta y extrajo un libro pequeño de cubierta dorada y un frasco que contenía una poción azul. De inmediato, Alex notó que la ampolla de vidrio era la botella que él había robado del Palacio de las Hadas. -Estás equivocada -dijo él en voz baja-. Siempre hay una opción.