Exhaustivo estudio de las condiciones del poder judicial en México hacia 1996, ante la necesidad de perfeccionar la impartición y procuración de justicia. Los autores analizan la evolución de los tribunales mexicanos a partir de la época prehispánica hasta la Constitución de 1917 y la transformación que el poder judicial ha experimentado desde que fue introducido en la Constitución federal de 1824.