Estas narraciones son de origen mozambiqueño, pero no estaban escritas, pues hace poco eran transmitidas en forma oral, principalmente por los ancianos. Al contarlas, los abuelos mozambiqueños no sólo querían divertir, sino también dar algunos consejos.
Gracias a esta serie, los niños de habla hispana pueden disfrutar de las interesantes historias de ese lejano y hermoso país africano.