Con y alrededor de Lovecraft cuaja de manera definitiva el cuento de horror materialista. En este tipo de narración, el horror acecha desde la más remota antigüedad o el lejano futuro, en las profundidades insondables del océano, los abismos del espacio exterior, o en lugares apartados de nuestro planeta, tales como el Tíbet, las selvas amazónicas o el desierto del Gobi. Incluso en dimensiones paralelas a la nuestra.