Antes, Romina era feliz; ahora, debe convivir con su hermanito, a quien todos miman, y con su abuela, que sólo se queja de sus pies. Y en la escuela, las cosas no van mejor. Un día, ella deja de sentirse invisible al contar una increíble historia sobre una expedición al Everest, aunque, luego las cosas se salen de control