Kel Saren se encuentra atrapado entre dos mundos. Para proteger a su querido príncipe, debe encontrar a los culpables de una masacre en el palacio real, y las únicas pistas las tiene el Caballero Muerte, el notorio criminal que gobierna el submundo de Castelana. El rastro que Kel sigue conduce de vuelta a la Colina, donde entre nobles decadentes y fiestas ostentosas se ha gestado una oscura conspiración para destruir a la familia real.