En los inicios de su vida pública, Osho realizaba campamentos de meditación de tres días a los que asistían personas de toda India, así como sus primeros seguidores de Occidente. En estos encuentros proponía una forma innovadora no solo de meditar sino también de ver la vida, mientras los asistentes experimentaban con meditaciones «activas» y «silenciosas». Este libro constituye un registro de uno de esos campamentos.