A Hazel y a Gus les gustaría tener vidas más comunes. Algunos dirían que no han nacido con estrella, que su mundo es injusto. Hazel y Gus son sólo adolescentes, pero si algo les ha enseñado el cáncer que padecen es que no hay tiempo para lamentaciones, porque, nos guste o no, sólo existe el hoy y el ahora. Y por ello, con la intención de hacer realidad el mayor deseo de Hazel -conocer a su escritor favorito-, cruzarán juntos el Atlántico para vivir una aventura contrarreloj, tan catártica como desgarradora.