¿Cuáles serán los empleos del futuro? ¿Cuántos habrá? ¿Quién los tendrá? Podemos imaginar —y esperar— que la revolución industrial que vivimos hoy resulte como la anterior.
Es decir que aún cuando algunos trabajos desaparezcan, se generen otros más para hacer frente a las innovaciones de una nueva era.
Sin embargo esta vez el panorama no será igual.