La propagación del mensaje cristiano es una de las campañas de marketing más notables de la historia de la humanidad. Si la voluntad de Jesús era eminentemente comunicativa, y si los apóstoles, poniendo por escrito su mensaje, amplían su alcance receptivo ?el share mediático?, todo apunta que los recursos de la moderna ciencia de la comunicación nos pueden ayudar a arrojar luz sobre uno de los episodios iniciáticos más espectaculares de la cultura occidental.