El enfoque global de la medicina tradicional china (al igual que la vieja tradición hipocrática occidental) hace del paciente como un todo, presupone que los síntomas mentales o psíquicos de las enfermedades son trastornos de movimientos de energías (gi) y de cantidades y calidades de yin-yang en las relaciones de los órganos entre sí y con el medio circundante.